22 de agosto de 2008

Gaviota... la mujer de mis sueños

“Seguro que algo le hicieron”….. el inspector es buen dato, pero hoy se lo llevan los diablos. Otros compañeros del curso, apostaban que era por el resultado del Clásico.

Mi amigo, Pedro, uno de los mas revoltosos recibió tremenda repelada de Julio, por encontrarlo afuera del aula de clase –claro que nadie reclamo a la profe de ingles por no asistir-. “Pórtense bien…que hoy no les aguanto una, nos dijo el inspector, Julio, a quien todos los chicos del tercer año apreciábamos mucho por sus útiles consejos que, quizás por ser joven –digamos que unos 27- eran de gran aceptación entre nuestra clase ciento por ciento masculina.

-Siéntense y hagan silencio…. Les voy a dar un consejo: Nunca…. y escuchen bien…, “nunca dejen a una mujer esperando y menos aun plantada, tampoco se les ocurra dejarlas con la palabra en la boca”, se convierten en una especie de fieras incomprensibles.

-Ese es problema que atormenta a Julio: Tuvo pito con la pelada por haberla dejado plantada. Esas fueron nuestras sabias conclusiones.

Entre sueño y sueño, una idea me perturba… veinte años después, el consejo de Julio viene a mi mente con voz propia diciéndome: Dejaste a aquella dama, de lindos labios y cuyo nombre evoca la libertad que se debe sentir surcar por los aires, con la palabra en la boca; o mejor dicho con la palabra en la pantalla.

Si creo que es eso. No puedo dormir muy bien…..Gaviota revolotea alrededor de mis sueños… siento el reproche de esta inteligente mujer, de esta culta y especial mujer; pero aun así, sigue siendo eso…una mujer. Y según, Julio y los tantos años de experiencia que han pasado, a una mujer no se la hace esperar porque no hay excusa que valga.

A pesar de esto, también recuerdo una frase que la dijo un antiguo sabio egipcio…- o talvez el vendedor de encebollados de la esquina??- : “El rio mas caudaloso es el que te da miedo cruzar” y yo voy a cruzar este rio.

LA EXCUSA

Mi querida y estimada amiga, -le digo amiga, porque aunque no he tenido el placer de escuchar su, seguramente armoniosa voz, en alguna tertulia; ni sujetar su cintura y contemplar su movimiento frenesí en un baile, si hemos cruzado juntos ciertos tramos de carretera ciberespacial-, la presente es para presentarle mis mas sentidas excusas y pedir disculpas, ante tan reprochable acto nocturno.

¿Qué a cuál me refiero? al de haberla dejado con las manos en el enter, al de terminar tan abruptamente una entretenida conversación virtual la noche de ayer.
No se preocupe, yo también mandé al diablo a alguien… A los de Pacifictel, por el mal servicio que prestan y que causó que se cortara mi conexión de internet, la cual después de varios intentos se hundió definitivamente en la defraudación.

Espero me crea, no me gustó dejarla en medio de la noche. Bueno al menos podré dormir y soñar tranquilo, porque de seguro me disculpa después de mi explicación , o al menos eso creo, - ahora que lo pienso, ojala no hayas sido tu aquella incomprensible novia de Julio, uno nunca sabe y este mundo es un pañuelo.

Atentamente: una bestia salvaje
Tony

(viernes, 22 de agosto de 2008 04:16:13 a.m.)


P.D. de Aroma: Amigo mío, pronto tu trasnochada, tendrá su recompensa!!

Mujer... gaviota

Mis ojos aún dormidos, borrosamente descubrían una sutil silueta con perfectas formas de mujer, con dos capullos de algodón que le adornaban.

Lentamente, su silueta se detenía ante mi absorta mirada, frente a mis ojos veía sus alas recogidas, envolviendo sus pechos como mágico tesoro.

Tìmidamente ruborizado, observaba el despliegue de una de sus alas, con mi pensamiento excitado, con impaciencia esperaba el despliegue de la otra para saciar mi mirada.

Como adivinando mi pensamiento, volteò su espalda a mis ganas, súbitamente comenzó a desplegarlas... mis ojos alucinados se preparaban, para deleitarse de su fémina silueta.

Mis deseos, como gotas de rocío, poco a poco desaparecían al descubrir que la sutil silueta, no era más, que una ¡suave gaviota! que revoleteaba sobre mi cabeza, cuando mi cuerpo reposaba en la calidez de la playa.

(25 Junio 2004)

Dialogando con una “Gaviota”... en el vuelo de la vida

“No es fácil, ya que la gaviota siempre esta preocupada de los vientos más no de quienes se encuentran en la tierra.” Es bastante fácil llegar a esa conclusión cuando uno se da cuenta que en ningún momento la “Gaviota” da una mirada retrospectiva, solamente ve los vientos que vienen ya que ellos se encargaran de llevarse todo lo que pueda haber pasado.

La velocidad, dirección e intensidad de los vientos es de vital importancia para su vuelo, espera la menor brisa para poder liberarse de la tierra, esperando que el viento del olvido arrase con todo lo que la pudo detener. No existen valores algunos que impidan que la “Gaviota” emprenda su vuelo dejando una secuela de recuerdos, que mientras ella vuela cobra un valor muy especial por el origen de los mismos, no fueron los motivos de la brisa; pero el vuelo de la Gaviota ha permitido que surjan ya que antes se encontraban bajo las alas de ella sin poder brillar.

Estoy seguro que cuando la Gaviota eche una mirada hacía atrás podrá observar a la distancia el brillo de lo que ha dejado, brillo fundamentado en transparencia y sentimiento en las acciones que la comenzaron a atar a la tierra, pero seguirá volando...

Gracias, que Dios te bendiga y proteja en tu vuelo eterno.

Con afecto:
Un mortal que quedó atrapado en la suavidad de sus alas


(5 septiembre del 2003 )